Desde el sábado 12 de junio, las embarazadas en Perú ya pueden ser inmunizadas contra la covid-19, siempre que sean mayores de edad y tengan 28 semanas de gestación o más. Según informó el Ministerio de Salud (Minsa), se proyecta vacunar a 30 mil gestantes cada mes, aunque por el momento sólo en Lima y Callao.
¿Por qué es tan importante que ahora las embarazadas tengan prioridad en la vacunación? Salud con lupa explica los puntos claves de esta decisión en medio de la actual crisis sanitaria.
Una emergencia en ascenso
Desde el inicio de la pandemia, más de 600 mujeres han muerto por complicaciones en el embarazo o parto. En 2020, del total de 439 muertes maternas registradas, 16.6 % tuvo como causa la enfermedad por covid-19. Este año, ese porcentaje sería mucho mayor.
“La covid-19 ha pasado a ser la primera causa de muerte materna en lo que va de este año”, señala Margarita Pérez Silva, decana del Colegio de Obstetras del Perú. De acuerdo al reporte del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC) hasta el 17 de abril, 38.6% de muertes maternas tuvieron como causa la enfermedad por coronavirus. Para esa fecha la cifra de mujeres fallecidas era 165. Un reporte más reciente, sin embargo, ya apunta a 239 fallecimientos hasta el 29 de mayo.
Como se recuerda, si bien las mujeres embarazadas no están en mayor riesgo de contagio que el resto de la población, sí enfrentan mayor riesgo de enfermar gravemente y requerir el ingreso a una unidad de cuidados intensivos. Aún más en el caso de las gestantes con obesidad, diabetes o hipertensión.
Enrique Guevara, secretario general de la Sociedad Peruana de Obstetricia y Ginecología, comenta que pese a lo crítico de haber retrocedido ocho años en el indicador de mortalidad materna, el tema pasó desapercibido. “Por eso hemos presionado para que vacunen a las gestantes ¿Por qué han muerto más mujeres? Justamente porque les ha dado covid-19”, indica.
Tanto este gremio como el Colegio de Obstetras solicitaron reiteradamente al Minsa que las gestantes fueran incluidas en los grupos de vacunación. Esto se hizo realidad el pasado fin de semana, luego de la recomendación por parte del Comité de Ética sobre los grupos de prioridad para la vacunación.
Más información, más evidencia
Uno de los motivos por los cuales no se planteó vacunar a las mujeres embarazadas antes, fue el conocimiento limitado sobre los efectos de la vacuna contra la covid-19 en esta población. De hecho, los criterios nacionales para la vacunación inicialmente consideraban al embarazo y la lactancia como contraindicaciones para la inoculación de la vacuna.
Sin embargo, como ya es sabido, el Minsa modificó su postura con el inicio de la vacunación al personal de primera línea a nivel nacional. Para entonces, la Organización Mundial de la Salud había recomendado vacunar a las mujeres embarazadas en mayor riesgo por su alta exposición a la covid-19. Entre ellas, las que se desempeñan como personal sanitario. Así, en febrero, la médica Marisa Cabrera fue la primera gestante en inocularse con la vacuna de Sinopharm teniendo 30 semanas de embarazo.
Hoy ya existen reportes de los efectos de la vacunación en mujeres embarazadas. Una investigación realizada en Estados Unidos incluyó alrededor de 36 mil gestantes vacunadas con las vacunas ARN mensajero de Pfizer y Moderna. Se evidenció que las reacciones adversas de las embarazadas no eran distintas a las de la población general. La incidencia de abortos espontáneos y órbita fetal en las mujeres vacunadas también estuvo dentro de lo esperado para las gestantes en general. Es decir, no hay evidencias de un mayor riesgo para la gestante o para el feto como producto de la vacunación.
En contraste, sí hay evidencia de los beneficios. Por ejemplo, los resultados del estudio MilkCorona, que analizó la presencia de anticuerpos en la leche materna de 75 mujeres lactantes vacunadas con Pfizer, Moderna y AstraZeneca (en este caso, solo con una dosis). Aunque la investigación aún no ha sido sometida a revisión formal de pares, sus conclusiones resultan de relevancia: en todos los casos se registró aumento de anticuerpos frente al SARS-Cov-2 como respuesta a la vacunación. Estos serían transmitidos a sus hijos a través de la lactancia.
Desde las 28 semanas de gestación
De acuerdo a las pautas establecidas por el Ministerio de Salud, la vacunación contra la covid-19 está dirigida a mujeres peruanas o extranjeras adultas a partir de las 28 semanas de embarazo. ¿Por qué no antes?
En México, las mujeres embarazadas se están vacunando desde la novena semana de gestación. En otros países, desde las 20 semanas. “Tal como es el calendario de vacunación que tenemos acá. Por ejemplo, la vacuna para el tétano se aplica a las 20 semanas”, indica la obstetra Margarita Pérez.
Según declaraciones de Guillermo Atencio La Rosa, director ejecutivo de la Dirección de Salud Sexual Reproductiva del Minsa, la decisión de vacunar desde la semana 28 atiende a que en el tercer trimestre del embarazo se presentan las complicaciones más graves. En esto concuerda Pérez, quien además señala que otro motivo podría ser la disponibilidad limitada de vacunas. Como explica el médico gineco-obstetra Enrique Guevara, la demora en priorizar a las gestantes en el plan de vacunación probablemente también responde a ese aspecto de logística. Según informó el CDC recientemente, la estimación de gestantes esperadas para el 2021 es de 783 mil 56.
Por otro lado, Guevara apunta también que es mejor programar la vacunación después de las 20 semanas de gestación, cuando ya es posible confirmar si el feto tiene malformaciones congénitas. “Si no, podrían echar la culpa que por ponerse la vacuna, hay un feto con malformaciones”, señala. En ese sentido, esperar a que el embarazo esté más avanzado evita que se generen conclusiones erradas sobre los efectos de la inoculación.
Como relata Margarita Pérez, aún existe un sector de la población con miedo a vacunarse y las embarazadas no son ajenas a ello. Por ese motivo, el Colegio de Obstetras reclama que se lleve a cabo una campaña agresiva de información que brinde tranquilidad a las gestantes sobre la seguridad de las vacunas.
La efectiva inmunización de este grupo vulnerable es un factor vital para evitar que Perú cierre el año del Bicentenario con la cifra más alta de muertes maternas de la última década. Un escenario que, tristemente, es cada vez más probable en la situación actual.
Consideraciones para la vacunación:
- Las gestantes pueden acudir al centro de vacunación más cercano a su domicilio, donde tendrán atención preferencial.
- Si la gestante presentó infección por covid-19, es recomendable esperar 90 días para recibir la vacuna.
- Si las gestantes han recibido otra vacuna durante el embarazo, debe esperar 14 días antes de iniciar la vacunación contra la covid-19.
- Para vacunarse, las gestantes deben presentar carnet de atención prenatal. Se puede solicitar en un establecimiento de salud público o privado.
- Luego de la vacunación, las gestantes deben continuar con atenciones prenatales y las medidas de prevención contra la covid-19. Las vacunas no evitan el contagio.
Actualización: En setiembre, el Ministerio de Salud anunció la vacunación a gestantes desde las 12 semanas de embarazo. Las mujeres embarazadas pueden ser inoculadas con cualquiera de las vacunas que se están administrando, pero si se trata de una gestante entre 12 y 17 años, se le aplica la vacuna de Pfizer, pues es la única autorizada para este grupo de edad.