A Williams Arreaga le dijeron que el cadáver de su papá —que falleció en el hospital Teodoro Maldonado Carbo de Guayaquil— sería llevado al Hospital Guasmo Sur de la misma ciudad. Hoy, jueves 9 de abril, catorce días después, todavía no le han entregado el cuerpo. “Mí papá ingresó al Teodoro Maldonado el 24 de marzo a la tres de la tarde, y murió el 26. Luego lo trasladaron al Guasmo y desde entonces estamos viniendo todos los días a que nos entreguen el cuerpo de mí papá”, dice Arreaga.
Williams es parte de los familiares que reclaman, en las afueras de este hospital ubicado en Guayaquil —la ciudad con más contagiados y muertos por COVID-19—, que les entreguen los cuerpos de sus seres queridos, fallecidos la última semana de marzo de 2020. La lista es larga pero se empezó a acortar el sábado 3 de abril, luego de un reportaje en el que se denunciaba la falta de información a los familiares y la innecesaria espera por los cuerpos.
El 3 de abril, a William Bazán le entregaron el cuerpo de su hermano. Ese mismo día, después de semana y media de espera, a Javier Merchán le dieron el cuerpo de su padre. Saúl Soriano también recuperó el de su padre, el domingo 4 de abril. Los tres familiares esperaron entre nueve y once días para ese proceso que les permitió, finalmente, despedirse de manera digna de sus seres queridos.
William Bazán, Javier Merchán y Saúl Soriano se conocieron en los exteriores del Hospital Guasmo Sur hace dos semanas, mientras exigían que les dieran respuestas sobre los cadáveres de sus familiares. Junto a otras diecisiete personas que reclamaban lo mismo, formaron un grupo de Whatsapp donde comparten información sobre el tema.
Hoy, jueves 9 de abril, en este grupo de chat aún hay personas que siguen preguntando si conocen de nueva información, si el gobierno ha dado nuevas directrices sobre los cuerpos. Varios de los que todavía esperan son familiares de quienes fallecieron en otros lugares, pero fueron trasladados al Hospital Guasmo Sur.
“Ayer fui al Hospital Guasmo Sur y me indicaron que los fallecidos de otro hospital no los iban a entregar”, me escribió el domingo 5 de abril, vía Whatsapp, Moisés Valle. Su padre, Washington Valle Plúas, murió el 29 de marzo en el Hospital Teodoro Maldonado Carbo y, dice Moisés, ese mismo día lo llevaron al del Guasmo Sur.
Toda esta semana, Valle ha esperado que le den una respuesta sobre cuándo le entregarán el cuerpo de su padre y dónde lo harán. “Necesitamos saber claramente cómo será este proceso…si los cuerpos lo entregarán ahí o en otro lado, o si directamente lo van a incinerar”, se queja. Dice que por un video de Facebook se ha enterado que los contenedores con los fallecidos que estaban en el Guasmo ya fueron trasladados al camposanto Parques de La Paz, y que un compañero que vive cerca del Hospital le contó que habían sacado unos contenedores de allí. “Lo único que queremos es una confirmación para saber dónde están los cuerpos, ya que hasta el momento estamos en la zozobra”.
Al igual que Moisés Valle, Francisco Aguilera tiene las mismas dudas de dónde ir y qué hacer. Su hermano Freddy Ramírez murió el 25 de marzo a las tres de la mañana en su domicilio, en la ciudadela Kennedy, donde vivía con su esposa. Esa madrugada, dice, llegó una ambulancia de Medicina Legal que se llevó el cuerpo al Hospital Guasmo Sur. Ya son quince días y Francisco Aguilera sigue sin saber dónde está el cuerpo de su hermano o si se lo van a entregar. “Mi mamá está devastada sin saber dónde está su hijo”, escribe vía Whatsapp.
La abuela de Rosa Quinde también falleció fuera del Hospital Guasmo Sur pero fue trasladada hasta ahí. Enriqueta Razo murió en la Clínica Kennedy, en la ciudadela del mismo nombre, el 25 de marzo. Desde ese día, Rosa no ha recibido información de dónde está el cuerpo de su abuela. “Nosotros no vamos a entregar esos cuerpos, se los van a llevar etiquetados y todo en regla a Parques de la Paz de Pascuales”, dijo vía telefónica Álvaro Ponce, gerente hospitalario del Hospital Guasmo Sur, el martes 7 de abril. “La decisión está tomada desde la semana pasada, no puedo entregar cuerpos que no murieron en el hospital”, agregó. Esta decisión no ha sido comunicada a Rosa Quinde, Moisés Valle, Francisco Aguilera y Williams Arteaga.
Según Ponce, la razón por la que no pueden entregar los cuerpos es porque no llegaron al hospital “admisionados”, “nosotros dimos el espacio físico para que pongan las morgues móviles”, dice Ponce vía telefónica. Además, dijo que los cuerpos están en las morgues frías, que están realizando un inventario para llevarlos a Parques de la Paz, y que hay una plataforma web para revisar dónde están las personas fallecidas.
El sitio web al que se refiere Ponce es http://coronavirusecuador.com y fue lanzado el mismo martes y anunciado por el presidente Lenín Moreno en su cuenta de Twitter.
Desde hoy, familiares de los fallecidos podrán revisar en https://t.co/h5UCj3HlvA en qué camposanto y nicho reposan sus restos. 146 compatriotas tuvieron un sepelio digno y diariamente lo haremos con cada uno de los hermanos fallecidos. Nuestra solidaridad con sus familiares. pic.twitter.com/VRqFBpuYpG
— Lenín Moreno (@Lenin) April 7, 2020
En la plataforma hay un mensaje que dice “Conoce dónde han sido sepultados los fallecidos levantados de las viviendas y hospitales de Guayaquil durante la emergencia, por medio de la gestión de la Fuerza de Tarea Conjunta” y luego hay un espacio para colocar el número de cédula o nombre completo del fallecido.
Ingresé el número de cédula de Freddy Ramírez, de Washington Valle, Williams Arreaga y Enriqueta Razo en el sistema y todos arrojaron la misma respuesta: No se encontraron resultados.
Un funcionario de BanEcuador, parte de la fuerza de tarea del manejo de los cadáveres me dijo, vía telefónica, que “seguramente estos cadáveres ya fueron enterrados” refiriéndose a los que fallecieron en otros lugares pero fueron llevados al Hospital Guasmo Sur. Dijo que BanEcuador asumió la responsabilidad del manejo de los cadáveres luego de que se diera esta demora en la entrega de los cuerpos, que el presidente del directorio del banco, Jorge Wated, ya denunció el mal manejo que hubo al inicio, pero que esas condiciones han mejorado y ahora tienen un protocolo para dar un entierro digno a los fallecidos. “No puedo decir que ningún cuerpo se ha extraviado, porque pudo pasar”, dijo y reiteró que se están corrigiendo los errores cometidos por el Ministerio de Salud.
Sin respuestas en el sistema en línea elaborado precisamente para brindarlas, y sin información clara del gobierno, los familiares no saben qué esperar en los próximos días y semanas. Temen que entierren o cremen a sus familiares sin que ellos hayan confirmado que ese cuerpo corresponde a su ser querido. “Lo que nosotros queremos como familiares es saber que mi hermano estaba ahí y lo cremaron o enterraron, que no quede perdido el cuerpo sin reconocimiento”, dice Francisco Aguilera.
Este artículo fue originalmente publicado por el medio GK y lo republicamos con su autorización.