A más de un año de la aparición de la covid-19 en el mundo, aún no existe un tratamiento específico para los pacientes con esta enfermedad. Sin embargo, hay protocolos internacionales de atención que se actualizan constantemente, de acuerdo con los avances en la investigación sobre la eficacia de los medicamentos usados. El objetivo de estas actualizaciones es evitar un gasto innecesario en medicinas que no ayudarán al paciente y, sobre todo, acelerar el tiempo de recuperación.
Un grupo de 22 profesionales de la salud se basó en estas actualizaciones para presentar la primera Guía práctica clínica sobre covid-19 en el Perú, un documento que será de cumplimiento obligatorio en los hospitales de EsSalud, entidad que financió la investigación. El epidemiólogo Álvaro Taype-Rondán, uno de los tres revisores de la metodología del documento, dijo que esta guía se actualizará cada uno o dos meses.
“Lo que ha habido antes de esta guía son lineamientos, que han ido actualizándose a través de una resolución ministerial (del Ministerio de Salud), pero que no hacen revisiones de literatura científica, ni explican de manera transparente quiénes son los elaboradores y cómo se ha llegado a las conclusiones. Eso los hace poco fiables”, afirmó el investigador Taype-Rondán, en referencia al protocolo de atención para pacientes covid-19 en los servicios hospitalarios del Ministerio de Salud (Minsa), el cual no ha sido actualizado desde octubre de 2020.
La guía presentada por EsSalud puede ser adoptada por establecimientos privados y por el Minsa. Sin embargo, fuentes del ministerio nos indicaron que por el momento no se tiene prevista una actualización.
Medicamentos que no se deben usar
La guía incluye 13 recomendaciones en contra; es decir, señala las 13 medicinas que ya no deberían ser usadas por los médicos durante el tratamiento hospitalario de la covid-19. Este es el caso de la ivermectina, que no está recomendada porque existe una certeza muy baja de su eficacia. La guía afirma que no se hallaron beneficios en evitar la mortalidad o el requerimiento de ventilación mecánica en pacientes hospitalizados con la enfermedad. Además, la administración masiva de este antiparasitario podría llevar a una falsa sensación de seguridad e inducir al relajamiento de las medidas de prevención contra el nuevo coronavirus.
Otras medicinas cuyo uso debe evitarse son la hidroxicloroquina y la cloroquina, dos antimaláricos que desde diciembre de 2020 ya no son recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Tampoco se recomienda el uso de la azitromicina, acetilcisteína, colchicina y el remdesivir. Este último no brinda un efecto beneficioso en la reducción de la mortalidad ni de la necesidad de ventilación mecánica, solo una pequeña mejora en los síntomas. Sin embargo, como tampoco cuenta con un registro sanitario en nuestro país, los especialistas decidieron no promover su uso.
Los corticoides inhalados, es decir, los que se usan a través de inhaladores (como los que requieren los pacientes con asma), tampoco están recomendados, pese a que en el principio de la pandemia se pensaba que podían ser efectivos. Los antibióticos, el plasma convaleciente y las vitaminas C y D se suman a esta lista de medicinas que no resultan beneficiosas para tratar a los pacientes con covid-19.
Ocho tratamientos beneficiosos
Desde octubre de 2020, el tocilizumab, un medicamento en monopolio de la farmacéutica Roche aprobado para casos de artritis reumatoide, ya no se encuentra en el protocolo de atención del Minsa para tratar a los hospitalizados por covid-19. Esto ha producido que las familias que necesitan esta medicina deben adquirirla en instituciones privadas y a un precio excesivo.
Sin embargo, EsSalud ha decidido indicarlo para personas con covid-19 severo a crítico, que requieren oxigenoterapia de alto flujo, ventilación mecánica no invasiva o con apenas 24 horas conectadas a un respirador, siempre y cuando se use con una dosis de 8mg/kg y en combinación con corticoides.
Si el paciente viene reaccionando bien a los corticoides, no habrá necesidad de aplicarle el tocilizumab, dice la guía. En efecto, los corticoides son uno de los pocos medicamentos que vienen siendo usados desde inicios de la pandemia en pacientes severos a críticos (sin necesidad de oxigenoterapia) y han brindado buenos resultados.
Entre otras terapias que recomienda esta guía se encuentra la oxigenoterapia para pacientes con una saturación menor de 93. También la ventilación mecánica invasiva, la pronación (poner al paciente boca abajo y con la cabeza de lado), la rehabilitación respiratoria, la fluidoterapia y los anticoagulantes.
Para elaborar su propuesta, el grupo de 22 profesionales, que incluyó médicos generales, intensivistas, internistas y epidemiólogos, tomó como referencia la Guía para el cuidado de pacientes adultos críticos con covid-19 en las Américas, de la Organización Panamericana de la Salud, y otros documentos de esta misma institución.