Una generación de niños marcada por el coronavirus
Después de la pensión de orfandad, el Estado necesita incluir programas integrales en salud mental y educación para garantizar la protección de una población infantil que está en riesgo.
Los niños huérfanos
de la pandemia
La pandemia ha remecido la vida que conocían los más pequeños. A más de 98 mil niños y adolescentes en el Perú el virus les quitó a sus padres o cuidadores de manera súbita. Esa pérdida es un golpe con varias secuelas que pone en riesgo a una generación.
Si bien el Estado ha empezado a entregar una pensión de orfandad, nuestra serie #CrecerSinPadres explora diversos frentes que se necesitan atender para reparar la salud mental, garantizar la educación y economía de los integrantes más vulnerables de estas familias. Varios chicos ya sufren secuelas emocionales por la pérdida, otros corren el riesgo de abandonar la escuela y se exponen a situaciones de violencia en hogares desintegrados.
Después de la pensión de orfandad, el Estado necesita incluir programas integrales en salud mental y educación para garantizar la protección de una población infantil que está en riesgo.
En el Perú, uno de los países con la tasa más alta de mortalidad por covid-19 en el mundo, se estima que alrededor de 10.900 niñas, niños y adolescentes* han quedado en situación de orfandad debido a la muerte de su madre o padre. Desde marzo, el Estado entrega una pensión de orfandad, pero muchas de las personas beneficiarias aún desconocen que tienen este derecho.
A dos meses desde que se aprobara la entrega de una pensión de orfandad para menores de edad que perdieron a sus padres por covid-19, no se ha llegado al 10% de la cifra estimada de beneficiarios. Familiares conversaron con Salud con lupa sobre las trabas que tuvieron para hacer este trámite de manera virtual.
La covid-19 arrebató a miles de niños y adolescentes el abrazo de sus padres, tíos y abuelos. Algunos quedaron al cuidado de familiares, pero otros pasaron a vivir en centros de acogida del Estado, donde reciben atención integral hasta cumplir 18 años de edad.
En Perú uno de cada cien menores ha perdido a sus padres o cuidadores por la covid-19. Especialistas apuntan a la necesidad de una respuesta multisectorial que aborde el impacto del duelo en su salud mental y desempeño escolar.
Desde abril, el Estado entrega una pensión de S/ 200 mensuales a los niños y adolescentes que perdieron a sus padres por la covid-19. Este beneficio, sumado a acompañamiento social y psicológico, podría llegar a todos los menores que quedaron huérfanos en la pandemia si el Congreso aprueba proyectos de ley que llevan dos meses en espera*.
Con el reglamento de la Ley de Orfandad publicado esta semana se creará un registro de niños y adolescentes que han perdido a sus padres o tutores, ya sea por la covid-19 o por otros motivos. Desde agosto, 25 mil huérfanos en pobreza empezarán a recibir una pensión de S/ 200 y acompañamiento integral. Para 2023, la asistencia busca llegar a 35 mil más.
Edición: Fabiola Torres / Investigación: Lucero Ascarza / Ilustraciones: Rocío Urtecho (Jugo Gástrico)