Vivimos en un país donde las instituciones públicas suelen restringir el acceso a los datos que tienen en su poder. Si buscamos en sus portales web nos topamos con páginas en eterno mantenimiento o portales de transparencia desactualizados. Y, si les pedimos información, recibimos como respuestas documentos tachados o interpretaciones erróneas de las normas que impiden su entrega. Los datos son parte de nuestra vida y hablamos de ellos en todo momento: cuando indagamos si un medicamento está disponible en el hospital donde nos atendemos o a qué precio lo venden en una farmacia privada, cuando queremos saber en qué gastan el dinero de los peruanos los partidos políticos o el Congreso, o cuando preguntamos si el médico que nos atiende está colegiado o no.
Todos estos datos son importantes para estar informados, tomar mejores decisiones, y fiscalizar la labor de los funcionarios y las instituciones del Estado. Por eso, nuestra sección Data pública busca que más personas sepan cómo acceder a los datos a través de peticiones de acceso a la información pública. No es necesario que seas un experto o experta en usar la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública ni cómo exigir su entrega en la vía judicial o administrativa. Aquí, nuestra compañera Lupita te explicará paso a paso cómo lograr un pedido exitoso.