El 17 de noviembre, el presidente interino, Francisco Sagasti, aseguró que el Perú fortalecería la estrategia sanitaria contra el Covid-19 con mejores decisiones basadas en la evidencia científica. Sin embargo, apenas un día después, la presidenta ejecutiva de EsSalud, Fiorella Molinelli, dio señales de lo contrario: despidió a la gerenta de investigación de salud, Yamilée Hurtado, quien dirigió el estudio sobre la hidroxicloroquina, ivermectina y azitromicina que concluyó que estos medicamentos no tuvieron ningún efecto terapéutico en los pacientes hospitalizados. Por el contrario, su combinación aumentó los riesgos de muerte.
Esta investigación ya había originado una crisis en el Instituto de Evaluación de Tecnologías en Salud e Investigación (IETSI) de EsSalud en octubre. Apenas se hizo público el estudio, su directora general, Patricia Pimentel, fue retirada del cargo con el argumento de que su trabajo no fue lo suficientemente riguroso. Además, en la resolución que dio por concluidos sus servicios se le exigió guardar la reserva del caso "bajo sanción de inhabilitarla para prestar servicios en el Estado".
Como lo señaló Salud con lupa en un anterior artículo, este estudio de EsSalud desnudó que las millonarias compras públicas de medicamentos que se hicieron para los asegurados con Covid-19 desatendieron las recomendaciones científicas de su propio grupo investigador. Solo entre marzo y septiembre, EsSalud gastó 23.3 millones de soles en hidroxicloroquina, ivermectina y azitromicina.
Al comienzo de la pandemia se justificaron las adquisiciones como uso de emergencia ante la falta de una terapia específica para tratar el Covid-19, pero las autoridades del seguro social siguieron comprando estas medicinas incluso después de julio, cuando IETSI ya había emitido un informe que planteaba que dejaran de usarse. Entonces, el grupo investigador se basaba en relevantes estudios aleatorizados internacionales como Solidarity, liderado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y Recovery, de la Universidad de Oxford, que ya mostraban que no tenían eficacia.
El 8 de octubre, el IETSI difundió los resultados de su estudio denominado "Desenlaces hospitalarios en pacientes hospitalizados con Covid-19 en EsSalud que recibieron hidroxicloroquina, azitromicina e ivermectina: emulación de un ensayo clínico". Los doctores Yamilée Hurtado, Percy Soto, Carlos Culquichicón y Roger Araujo recogieron información de 5.683 pacientes con coronavirus y evaluaron el uso individual y combinado de los medicamentos mencionados. Se compararon los efectos entre un grupo de pacientes que los recibieron y los que no tomaron ninguno.
El estudio reveló que el grupo de personas que recibió hidroxicloroquina con azitromicina durante las primeras 48 horas después de haber ingresado al hospital tuvo 84% más riesgo de morir durante su internamiento; asimismo, 49% más riesgo de ingresar a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y 70% más riesgo de requerir oxígeno. Estas conclusiones generaron malestar en la presidenta de EsSalud, Fiorella Molinelli, quien sacó a Patricia Pimentel de la dirección del IETSI un día después.
Réplica y segundo despido
Tras la salida de Patricia Pimentel, la dirección del IETSI quedó temporalmente en manos de la doctora Cecilia Bedoya. En lugar de respaldar a los investigadores del estudio, ella les pidió que “subsanaran la calidad de los datos y los aspectos formales del documento para mejorar los resultados del estudio”.
El 30 de octubre pasado, Bedoya envió un memorando a la entonces gerenta de investigación, Yamilée Hurtado, para que revisara y modificara sus conclusiones por un presunto sesgo e interpretación errada de variables. Salud con lupa publica ahora este documento y los informes de respuesta que terminaron con su despido.
La doctora Yamilée Hurtado y su equipo investigador respondieron con un informe detallado a cada una de las observaciones remitidas por Bedoya.
Basada en este documento, el 2 de noviembre Hurtado respondió a Bedoya lo siguiente: “las observaciones que se han hecho llegar por su Despacho no cuentan con sustento científico que pongan en entredicho los resultados del estudio, lo que se hace evidente por la solvencia con las que se han podido resolver. Por el contrario, refuerzan su solidez y confianza”.
El 18 de noviembre, la presidenta de EsSalud, Fiorella Molinelli, firmó la resolución del despido de Hurtado.
Salud con lupa intentó comunicarse con los voceros del seguro social y los investigadores involucrados, pero no obtuvo respuesta.
